Con el encaje de bolillos es posible hacer casi cualquier cosa; se trata de un trabajo tan delicado y especial que todo lo que con esta técnica se realice tiene el éxito asegurado.

Uno de los trabajos más conocidos son los abanicos; y es que son realmente bonitos y llamativos colocados en sus abaniqueras.

Existen gran variedad de picados para abanicos ya que desde siempre ha sido uno de los más populares.

Durante la segunda mitad del siglo XVII los abanicos plegables se ponen de moda entre las damas de toda Europa, especialmente los de encaje de bolillos. Pero es en el siglo XVIII cuando alcanzan su mayor esplendor, siendo un accesorio imprescindible dentro del vestuario.

Este accesorio llega hasta nuestros días, pero debido a la gran variedad de materiales actuales, los abanicos de bolillos quedan relegados a los abanicos de novia o de exposición.

Existen picados de abanicos con gran variedad de motivos: desde los más clásicos hasta los más modernos. Los podemos encontrar con hojas de Guipur, flores de Brujas, encaje ruso, etc.

Y para realzar aún más el resultado se utilizan hilos metalizados aunque pueden realizarse de igual manera con algodón, seda o rayón, así como utilizar cuentas de cristal entrelazadas con el hilo.

El último paso de nuestro trabajo, es la colocación de la labor en las varillas, y aquí también encontramos gran variedad de materiales. El resultado final dependerá en gran medida de la elección del varillaje, en maderas naturales o lacadas, calados, adornos y decorados varios.

Os mostramos algunos de los abanicos de Bolilos elaborados en QueSeCose continuación: